El agua es el líquido vital para todos los seres vivos. Los humanos usamos agua para todo tipo de actividades, desde el consumo en su forma natural como bebida, para la higiene básica y en procesos industriales para obtener los productos de uso diario.
Y para tener agua de buena calidad, apta para su consumo, es indispensable vigilarla desde su origen en embalses, ríos y pozos, hasta las plantas de tratamiento donde viaja por la red de distribución hasta el consumidor final.
En esta nueva publicación para el blog de Pochteca hablaremos sobre la calidad del agua para el consumo humano y los productos más utilizados para obtener agua potable.
¿Qué parámetros se analizan para obtener agua potable?
La calidad del agua se determina al comparar las características fisicoquímicas de una muestra de agua con los estándares para asegurarse de que cumpla con niveles de toxicidad adecuados para los organismos acuáticos y para el consumo de agua por humanos. Algunas de las características que se analizan son:
- El mal olor del agua suele relacionarse a la descomposición de la materia orgánica presente en el suelo o a la presencia de metales pesados.
- La turbidez del agua se atribuye a la presencia de taninos, ácidos grasos, ácidos fúlvicos, lignina y otros contaminantes como los compuestos coloreados. La causa más frecuente del agua turbia son partículas en suspensión o coloides, que reducen la transparencia del agua y provocan el rechazo de los consumidores
- El mal sabor del agua es el principal motivo de rechazo del agua por parte del consumidor, y que suele indicar la presencia de compuestos orgánicos, algas y contaminantes en el agua.
- Presencia de bacterias coliformes, estreptococos, E. Coli y otros microorganismos cuya población puede crecer y diversificarse con mucha rapidez.
- Metales pesados (cobre, cromo, níquel, hierro, plomo) que pueden provocar incrustaciones en las tuberías, pero también intoxicar a la población que consuma agua contaminada.
- Cloro libre residual y cloro combinado residual. Si bien el cloro se ha utilizado por décadas en los procesos de desinfección del agua, sin embargo es muy corrosivo cuando se encuentra en contacto con el agua, por lo que los tratamientos con cloración usan dosis muy bajas para que no afecte a la salud del consumidor ni a las tuberías.
La importancia del pH del agua
El pH es la medida con la que se clasifican los líquidos en función de su acidez o alcalinidad. El nivel de acidez o alcalinidad del agua influye en otros fenómenos como la corrosión e incrustaciones en las redes de distribución. Además, un pH inadecuado puede interferir con los procesos de tratamiento de agua, como la coagulación y la flotación.
En la escala del 0 al 14 del pH, el agua debe ubicarse en el nivel 7, es decir, en el punto medio. Por debajo de ese rango se considera que un líquido es ácido (el jugo de limón tiene un pH de 2,5) y por encima un líquido es alcalino (la sosa cáustica tiene un pH de 14). En general, el rango de pH del agua potable debe ser de 6 a 9 para garantizar la salud y seguridad pública.
Cuando se tiene un agua con pH bajo, se convierte en un líquido corrosivo que podría causar daños a las tuberías de metal, manchas en la ropa, una coloración azul verdosa en los desagües, además de un sabor metálico y amargo. Este problema suele tratarse con el uso de un neutralizador (como el carbonato de calcio) para evitar que el agua reaccione con las tuberías, o que provoque corrosión electrolítica.
Por su parte, un agua alcalina con un pH alto puede provocar problemas de incrustaciones por dureza, que suelen causar la formación de sarro en las tuberías y accesorios que provocan baja presión del agua y reducen el diámetro interior de las tuberías. Esta alcalinidad le da un sabor salino al agua, reduce la vida útil de los calentadores de agua y puede reaccionar con jabones y detergentes para manchar la ropa.
Productos para el tratamiento de agua
Existe una extensa variedad de tipos de productos químicos para tratamiento de aguas para potabilizarla y hacerla apta para el consumo. Algunos de los más comunes y que encontrarás en Pochteca son:
- Modificadores de pH – ácido clorhídrico, ácido fosfórico, bisulfato de sodio, carbonato de sodio.
- Desinfectantes – tricloro, aquatrol.
- Controladores de dureza – EDTA alcalino
- Floculantes aniónicos y catiónicos
- Acondicionadores – fosfato trisódico
- Antiespumantes – GDE 10
- Biocidas – hipoclorito de sodio, ácido tricloro isocianúrico
- Oxidantes – peróxido de hidrógeno
- Membranas de ósmosis inversa
- Resinas de intercambio iónico
- Coagulantes
Ahora que conoces más sobre la calidad del agua y los productos para potabilizarla y brindar un líquido seguro para los consumidores, te invitamos a navegar por la página de Pochteca, donde encontrarás una extensa variedad de productos químicos para la industria de tratamiento de agua.
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